['andiamo andiamo']
Da mediodía. Colma la hora de las chicharras
dando plano
Da mediodía. Colma la hora de las chicharras
dando plano
aun así, anuncias de tu marcha
sin permiso alterno.
Pintan bastos
de postrarse en los pasillos
a aguardar.
A sabiendas dejaste
en el umbral
solo una pincelada
quita y pon
quita y pon
de sombra
desteñida.
Porque canta de hastío
el inverosímil
asiento
duro
sin respaldo,
horario de llorar solo locuras,
llantos
llantos.
Y a su espaldar soberbio,
las cariátides
inamovibles
han cargado
un vagón de
oscuras golondrinas,
esas de balcón
esas de balcón
oro parque natural.
Cuidado, que tus huellas
delatoras
han manchado el dintel
color sonrisa enfoscada
mas se llevan
de muerte
la alforja llena.
Das
de calma
con el nombre mimado
de la suerte que te aqueja.
(ponlo en rojo
cuitado
carmesí con dos chinchetas)
Y en el primer recodo de la esquina,
cuando puedas
pon a salvo el puñal de hendir
conciertos.
Luego cuelga inconfundible
el cartel
de cerrado por reformas.
-Trasiego y guerra
sin rito y sin cuartel a toda costa-
¡Ay,
recién enajenado que te sufres
de hambres, ay,
y engaños!
Das de mano
post meridiem
hasta el filo del
único minuto
tan
es
tr
ech
o
Mil son cuentas de azar
desaparezcas
y conviertas
en la estatua baldía, solo sal
desmesuradA,
nadA
Si me miras pasar
flotantE
en la curva exigua
de las tardes,
extr
añO.
extr
añO.